El presidente de Kazajistán, Kasym-Yomart Tokáyev, ha ratificado una nueva ley que introduce enmiendas significativas en la legislación de salud del país, centradas en la prohibición de la importación, producción y venta de vaporizadores, así como de productos de tabaco sin combustión. Este conjunto de medidas, que también incluye la restricción a la publicidad de estos productos, tiene como finalidad la protección de la salud pública y especialmente de los jóvenes contra las sustancias que contienen nicotina. La normativa entrará en vigor 60 días tras su publicación oficial, marcando un paso decisivo en la política de salud kazaja.
Esta legislación no solo responde a las instrucciones presidenciales de fortalecer el sistema de protección legal y financiera en el ámbito de la salud, sino que también aumenta la responsabilidad de los trabajadores médicos en el país. Con estas acciones, Kazajistán busca implementar un enfoque más sistemático para combatir la propagación del consumo de nicotina entre los jóvenes, alineándose con movimientos similares en otras naciones, como el Reino Unido, donde recientemente se anunció la prohibición de vapeadores desechables para frenar el vapeo juvenil.
