En las recientes dos semanas, una serie de decesos ha ensombrecido los hogares de cinco destacados legisladores, llevando el duelo y la conmoción a los corredores del Congreso Nacional. Se han registrado cuatro pérdidas en el Senado de la República y una adicional en la Cámara de Diputados, sumiendo en profunda tristeza tanto a congresistas como a empleados de esta institución legislativa.
En este tiempo de luto, el crespón o «lazo negro» se ha convertido en un símbolo distintivo en varias oficinas provinciales de los legisladores, reflejando el pesar que actualmente embarga a la comunidad parlamentaria.
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Diputado Alfredo Pacheco: Luto por el fallecimiento de su hijo Luis Alfredo Pacheco Rojas, quien murió a tiros en Houston, Texas.
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Senador José del Castillo Saviñón: Luto por el deceso de su hijo José Manuel del Castillo Vanderline, a los 19 años, en circunstancias aún no esclarecidas.
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Senador Pedro Catrain: Luto por el fallecimiento de su esposa Quisqueya Henríquez, destacada artista y profesora de arte, debido a cáncer de estómago.
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Senadora Melanie Salvador: Luto por la muerte de su hermana en horas tempranas de un martes, sin detalles adicionales proporcionados.
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Senador Bautista Rojas: Luto por el fallecimiento de su hermano Miguel Valerio Rojas, con causas de muerte no especificadas.
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Diputado Julio Brito Piña: Luto por su propio fallecimiento después de complicaciones de salud, representante de Azúa por cuatro periodos consecutivos desde 2006.
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Asistente de Senador de Elías Piña, Adilka Feliz: Luto en la oficina del legislador peledeísta Iván Lorenzo por el fallecimiento de su asistente de 33 años.
La reciente ola de fallecimientos de familiares cercanos a cinco legisladores ha sumido al Congreso Dominicano en un estado de luto y conmoción, afectando tanto al Senado como a la Cámara de Diputados en las últimas dos semanas. Este periodo sombrío ha unido a los miembros del Congreso en dolor y solidaridad, manifestado a través del simbólico crespón negro, reflejo del duelo que ahora embarga a la comunidad legislativa. Estos eventos subrayan la intersección entre la vida personal de los políticos y su rol público, revelando cómo las tragedias personales pueden impactar profundamente en la dinámica y el ambiente de las instituciones gubernamentales, mientras resaltan la vulnerabilidad humana frente a la pérdida.
