Cientos de manifestantes asaltaron este martes la sede del Parlamento de Kenia en Nairobi e incendiaron una parte del edificio, en protesta contra un proyecto de ley respaldado por el Gobierno que contempla subir y crear nuevos impuestos. La manifestación, impulsada principalmente por jóvenes y marcada por enfrentamientos violentos con la policía, dejó varios cuerpos tendidos alrededor del Parlamento, sin que aún se conozca el número exacto de muertos y heridos. Los manifestantes lograron ingresar al recinto a través del Senado, destrozando mobiliario y ventanas, mientras acusaban a los políticos de «traidores» por votar a favor del polémico Proyecto de Ley de Finanzas de 2024.
Los enfrentamientos se extendieron más allá del Parlamento, alcanzando edificios oficiales cercanos, como la Oficina del Gobernador de Nairobi, también incendiada por los manifestantes. La protesta, que comenzó como una marcha contra las subidas de impuestos en varias ciudades del país, derivó en una batalla campal entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes, resultando en la detención de más de 300 personas y numerosos heridos. A diferencia de protestas antigubernamentales anteriores en Kenia, estas manifestaciones fueron organizadas a través de redes sociales por jóvenes de la llamada ‘generación Z’, quienes sostienen que las medidas fiscales propuestas empujan a la población a la pobreza.
