Con vehemencia, rechazamos de manera rotunda y absoluta el proyecto de ley que amenaza con despojarnos de Bayahibe, joya turística y parte integral de nuestra provincia La Altagracia. Bayahibe no es solo un destino, es el fruto de generaciones que han construido su hogar, cultura y sustento en esta tierra. Ceder parte de nuestro territorio significaría no solo una pérdida geográfica, sino un golpe a la identidad y prosperidad de nuestra comunidad. Hacemos un llamado urgente a la reflexión y resistencia para preservar lo que es nuestro, defendiendo no solo nuestros recursos, sino la esencia misma de quienes somos todos: Orgullosos Altagracianos.
Es imperativo reconocer que gran parte del territorio de Bayahibe forma parte del Parque Nacional Cotubanamá, en homenaje a un guerrero taíno cuya historia debemos verificar y respetar. La importancia de esta tierra va más allá de su atractivo turístico; es un santuario natural que merece conservación y respeto. Al constatar que la Isla Saona, integrante de este parque, tiene sus mesas electorales adscritas a La Romana, surge la necesidad de una revisión coherente y justa de la delimitación territorial. Es esencial garantizar que la administración y representación reflejen con precisión la realidad geográfica y cultural, resguardando la integridad de estos espacios que son patrimonio de La Altagracia.
Cabe destacar que la Fundación de La Provincia La Altagracia, en agosto de 1961, es gracias a la Ley No. 5597, en su artículo No. 1, dice que a partir de agosto de 1962, “los territorios del municipio de Higüey, incluyendo los del Distrito Municipal de San Rafael de Yuma quedarán constituidos en provincia, con el nombre de La Altagracia y con Salvaleón de Higüey como su capital”.
En tanto, el artículo No. 2 la referida ley establece que desde la misma fecha, el territorio del Distrito Municipal de San Rafael del Yuma quedará erigido en municipio, con su cabecera en la Villa de San Rafael del Yuma.
A todo ello, resaltamos que la Provincia La Altagracia tiene como frontera Natural con la de La Romana, el Río Chavón. Es decir, la naturaleza misma ha delineado a Bayahibe como un tesoro intrínseco de La Altagracia. Su paisaje, biodiversidad y conexión con el Parque Nacional Cotubanamá son testigos de una armonía única entre el entorno natural y nuestra comunidad. Esta unión no solo es geográfica, sino espiritual, y la esencia misma de Bayahibe está arraigada en la tierra de La Altagracia. La sabiduría de la naturaleza, plasmada en cada rincón de esta región, valida su pertenencia a nuestra provincia y destaca la importancia de preservar este equilibrio para las generaciones futuras.
Adicionalmente, es esencial reconocer que la gran mayoría de los atractivos turísticos de Bayahibe son disfrutados por los visitantes que eligen hospedarse en Bavaro, Verón-Punta Cana. Esta conexión turística y económica es inseparable, ya que ambas regiones se complementan mutuamente para ofrecer una experiencia integral a los turistas. La sinergia entre Bayahibe, Bavaro y Verón-Punta Cana no solo fortalece la oferta turística, sino que también contribuye significativamente al desarrollo económico conjunto. Alterar esta conexión comprometería no solo la identidad de Bayahibe, sino también la vitalidad económica que sustenta a ambas comunidades de manera interdependiente.
Lic. Jorge Leonardo Tavárez Valdez
Candidato a Diputado
