Tiro al blanco
Por Rafael L. Olivo
De un tiempo a esta parte los haitianófilos del patio, sirviendo a oscuros intereses, muchos de ellos pagados con fondos de las Naciones Unidas, la Unión Europea, de diferentes ONG’s comprometidas conque nos hagamos cargo de Haití y, a menudo, hasta por nuestro propio gobierno, nos venden la idea de que nuestra Independencia de Haití NO fue una Independencia, si no una “separación”, queriendo argumentar que nuestra verdadera independencia fue la que conocemos como “La Restauración”, incluso, dicen que Duarte NO es el Padre de la Patria Dominicana, por lo que pueden concluir que si solo fue una “ligera” e “insignificante” separación, lo más natural es que no sea un problema que nos terminemos uniendo con nuestros “hermanos”.
Vamos a poner las cosas en perspectiva, una separación ocurre cuando una nación se escinde de otra con la que siempre estuvo unida y tuvo un origen común, y con la cual comparte cultura y una formación común. Eso es evidente en su historia, raza, idioma, cultura, idiosincrasia, etc.
En América, para poner un ejemplo, tenemos los casos de todos los países que conformaron “La Gran Colombia que, al no funcionar, se separaron, tales como Venezuela, Colombia, Ecuador, etc. de Texas, que se separó de México, de Bolivia que se separó (o le separaron) de Perú, de Panamá, que se separó de Colombia, etc. en Europa tenemos el ejemplo de La República Chequia y Eslovaquia que se separaron de mutuo acuerdo.
Sin embargo, tenemos que España, una nación con más de mil años de historia, celebra cada año su independencia de Francia, la cual sucedió el 02 de mayo del 1808, independencia que les costó 6 años de guerra y mucha sangre. El contexto fue que Francia, otro país europeo, que les había invadido hacía apenas un año, pero España NO se separó, sino que se independizó.
Haití NO es un país con el que República Dominicana compartiera raíces taínas, españolas, religiosas, lingüísticas o culturales, tampoco evolucionaron como una sola nación, y lo único que nos unió fue la Invasión Haitiana del 1822 al 1844, durante la cual Haití hizo todo lo posible por desaparecer todo rastro identitario que hacían única a la que hoy conocemos como República Dominicana.
Por lo que sí, tenemos base para afirmar que nuestros padres de la patria son Duarte, Sánchez y Mella, y que nuestra independencia se consiguió el 27 de febrero del 1844, que se peleó por la misma dura te 11 largos años y que se derramó ríos de sangre a lo largo de 14 batallas.
Por lo que, viendo todo lo anterior, maldito aquel que diga lo contrario, y si es dominicano, maldito y traidor.
