El Departamento de Estado de Estados Unidos ha propuesto un programa piloto que exigiría una fianza de entre 5,000 y 15,000 dólares a solicitantes de visas B1/B2 (negocios o turismo) provenientes de países con altos índices de permanencia ilegal o controles deficientes en documentos. Esta medida busca garantizar que el gobierno no incurra en pérdidas económicas en caso de que los visitantes no cumplan con los términos de sus visas. El programa tendrá una duración inicial de 12 meses y se activará 15 días después de su publicación oficial en el Registro Federal.
Esta propuesta se suma a una serie de restricciones adicionales que endurecen el proceso de obtención de visas. Entre ellas se incluyen entrevistas presenciales para renovaciones y la obligación de que los solicitantes de la Lotería de Diversidad posean pasaportes válidos de su país de origen. Aunque aún no se ha publicado la lista de países afectados, el Departamento de Estado indicó que la fianza podría eliminarse según las circunstancias individuales de cada solicitante.