REDACCION.- En julio de 2021, el asesinato del presidente haitiano Jovenel Moïse llevó a una exhaustiva investigación, culminando en un informe final donde se acusa formalmente a varias figuras prominentes, incluyendo a la viuda del presidente, Martine Moïse, al ex primer ministro Claude Joseph, y al exdirector de la Policía Nacional de Haití, Léon Charles, entre otros. Casi 50 sospechosos han sido encausados en este detallado informe de 122 páginas, señalando a algunos por complicidad y otros por asesinato, en un caso que promete desestabilizar aún más a un país ya golpeado por la violencia de pandillas y recientes protestas.
El caso destaca un supuesto complot que incluyó la contratación de mercenarios para llevar a cabo el homicidio, con vinculaciones en Haití y Florida. Entre los extraditados a Estados Unidos, donde enfrentan cargos federales, se encuentran Christian Emmanuel Sanon, quien aspiraba a la presidencia de Haití, y Joseph Vincent, exinformante de la DEA. El ataque, perpetrado en la residencia privada de Moïse, se describió como una violenta incursión que culminó con el asesinato del presidente, en un momento de gran vulnerabilidad para la seguridad nacional de Haití, subrayando la profunda crisis que atraviesa el país.