MOSCU.- El presidente ruso, Vladímir Putin, promulgó una ley que prohíbe la adopción de niños rusos por parte de ciudadanos de países donde se permite el cambio de sexo, ya sea mediante tratamiento médico o mediante el cambio de género en los documentos de identidad. La medida tiene como objetivo, según la Duma, «excluir cualquier posibilidad de adopción de niños rusos por parte de representantes de las comunidades LGBT». Viacheslav Volodin, presidente de la Duma, justificó la ley argumentando la necesidad de proteger a los menores, y criticó las políticas de países como Italia, España, Alemania, Bélgica y Suiza, que permiten el cambio de sexo entre los menores, calificándolas de «funestas».
La vicepresidenta de la Duma, Anna Kuznetsova, informó que las adopciones de niños rusos por parte de extranjeros han cesado por completo en los últimos años, después de que más de 100,000 menores fueran adoptados durante las tres décadas anteriores. Desde 2011, Rusia ha endurecido los requisitos de adopción para los países que han legalizado el matrimonio homosexual, exigiendo la firma de convenios bilaterales como condición para permitir las adopciones. Esta nueva ley refuerza aún más las restricciones, limitando las posibilidades de adopción a nivel internacional.