Recientemente visité mi querido pueblo de Miches en ocasión de la inauguración del reconstruido Muelle Turístico, una obra entregada por el Ministerio de Turismo (MITUR) tras su colapso en septiembre de 2022 a causa de los embates del huracán Fiona. Esta intervención, tan significativa como necesaria, impulsa el desarrollo de una comunidad costera que se ha convertido en referente del turismo emergente en el Este del país.
Sin embargo, la alegría del momento se desvaneció al acercarme a la playa pública más representativa del municipio: Playa Arriba. Lo que encontré fue desolador. La belleza natural que marcó nuestra infancia y adolescencia hoy está opacada por el abandono, la falta de regulación, el desorden y un manejo ambiental deficiente.
Desde la entrada, la arrabalización es evidente: residuos de sargazo sin recoger (pocos, pero notables y que feo se ve), ausencia de mantenimiento municipal y un paisaje caótico de casetas y tarantines sin baños —pese a anuncios de instalación—, cada uno con música a alto volumen que genera contaminación sonora y espanta la tranquilidad de muchos de los visitantes. El resultado: un ruido generalizado por la competencia entre dueños, cuando lo sensato sería un sistema de audio unificado y regulado, con programación musical por bloques, como ocurre en los negocitos del malecón de San Pedro de Macorís.
¿Cómo es posible que un activo turístico de esta escala carezca de organización, limpieza y control ambiental efectivos? ¿Dónde están las autoridades locales para garantizar que Playa Arriba —ya marcada por el inaceptable ecocidio del corte de manglares y rellenos irregulares de arena ocurrido en el pasado y que en el futuro se le debe pasar factura a todos los responsables “¡Abusadores!”— recupere su atractivo y vuelva a ser motivo de orgullo para nosotros los micheros?.
Desde este espacio exhortamos al Ayuntamiento de Miches y al MITUR a intervenir con urgencia para rescatar, limpiar, ordenar y administrar la Playa Arriba bajo criterios de sostenibilidad, tomando como referencia modelos exitosos como los kioscos de Playa Macao en Verón–Punta Cana: módulos regulados, sanitarios operativos, manejo integral de residuos, control del ruido, señalización, seguridad y vigilancia ambiental.
De no actuar, corremos el riesgo de que todo el que nos visita en Playa Arriba, no regresen. Miches no se merece eso… Nuestro pueblo merece una playa limpia, segura y bonita para su gente y para quienes la visitan. Cuánto duele verla así.
¡Ay, mi playa!
Robert Linarez
Lunes 20 de octubre de 2025
6 y 06 am