Capitalismo salvaje disfrazado de humanismo

Tiro al blanco

Rafael L. Olivo

Partiendo del principio de que “vivimos en un país de gente bruta” (frase favorita del fenecido Dr. Máximo Veras Goico, psiquiatra), y que “al bruto se le engaña fácilmente”, es que los empresarios de bienes raíces y/o de la construcción, además de los empresarios de la agricultura, han desplegado una campaña “humanista” a favor de los haitianos en el país desde hace años, con la cual solo buscan tener a mano a sus esclavos favoritos, que lo único que ha conseguido es llenar el país de haitianos (legales e ilegales) a rebosar, donde hemos llegado al colmo de que en nuestros hospitales, paren más haitianas que dominicanas.

Estos empresarios meten presión política a nuestros presidentes y legisladores al invertir en sus campañas cuando aún son candidatos, también a través de sus medios de comunicación (a los cuales llaman falsamente “opinión pública”) patrocinan ONGs e, incluso, con sus contactos internacionales, son los mismos que emprenden campaña nacionales e internacionales en contra de las deportaciones y de la aplicación de la Ley de Migración.

Vemos estas campañas muy bien coordinadas que apelan a términos “racismo”, “odio”, “xenofobia”, etc. Llamando al “amor”, la “comprensión entre hermanos”, a los “Derechos Humanos”, etc. Pero que lo único que desean es que los salarios se mantengan todo lo bajo posible, de forma tal que sus fortunas se incrementen todos los días, mientras le pagan miserias a sus empleados.

Nos quieren hacer creer que un salario de 1,500 pesos diarios (25 dólares) está “más que bien”, y que un trabajador dominicano NO puede siquiera aspirar a ganar 3,600 pesos diarios (60 dólares) como mínimo, ya que, como esclavo al fin, “no tiene derecho a ello”, o eso nos quieren hacer creer los empresarios.

Un país se desarrolla, no tanto por la riquezas que genere, si no por la justa distribución entre su población, dado que hay países africanos que producen uranio, diamantes, petróleo, en cantidades impresionante, pero son países “pobres” ¿por qué? Porque todos esos recursos se quedan en unas pocas manos.

Lo anterior NO significa que los empresarios no se harán ricos o que no obtendrán ganancias, lo que no harán será hacerse ricos sobre los estómagos vacíos de la población.